En el marco de la estrategia PotencIA Digital, el Ministerio TIC en alianza con iNNpulsa Colombia, busca seguir entregando contenido que permita a los emprendimientos digitales fortalecer sus negocios y llevarlos a un nivel superior. De aquí en adelante, cada semana, los interesados en el tema podrán consultar esta información, descargarla y compartirla.
Seguimos trabajando porque Colombia sea PotencIA Digital y llegar a todos los territorios del país.
Una ruta para la conciliación presupuestal entre áreas
Las organizaciones frecuentemente enfrentan tensiones entre el área financiera y las demás áreas debido a los cambios presupuestarios. Desde PotencIA Digital, la iniciativa liderada por el Ministerio de las Tecnologías de la Información y la Comunicación, el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo e iNNpulsa Colombia sabemos que estos cambios impactan significativamente a toda la organización, pero una adecuada conciliación es posible a través de una buena comunicación.
Para resolver estos conflictos, es esencial traer alternativas a la mesa y plantear escenarios claros. Por ejemplo, discutir la viabilidad de atraer inversionistas o buscar financiamiento, evaluando el costo y el retorno financiero del proyecto. Encontrar un equilibrio en el retorno financiero es esencial para decidir si abrir o no nuevas líneas de negocio.
A medida que avanza el año, es importante comparar el presupuesto realizado con la realidad. Si las ventas esperadas no se están cumpliendo, es el momento de hacer una pausa y tomar decisiones a tiempo, ajustando el rumbo según las nuevas circunstancias. Es importante considerar que, ante situaciones imprevistas, los presupuestos deben ser flexibles y adaptarse.
En este contexto, se debe conciliar con las diferentes áreas de la organización. La planeación no solo es financiera, también metodológica, y no siempre es fácil comunicar la necesidad de reducir o adaptar presupuestos. Encontrar un punto de equilibrio, donde se consideren tanto las razones financieras como la realidad comercial es de vital importancia.
Cuando se organizan los presupuestos, todos soñamos en grande, especialmente cuando se diseñan metas de ventas anuales. Este enfoque no está mal; después de todo, nuestras empresas necesitan grandes aspiraciones para crecer y prosperar. Sin embargo, es importante que, al crear presupuestos, también consideremos la valoración de nuestra empresa y que los indicadores que usamos para medir el crecimiento estén alineados con el desempeño real de la empresa.
Por ejemplo, podemos basar nuestras proyecciones en los ingresos recurrentes de los últimos años, ajustados por la inflación y el crecimiento esperado del mercado. Comparar estas cifras con las tendencias del sector más relevante para nuestra empresa nos ofrece una combinación efectiva para proyectar el crecimiento.
Lo anterior nos permitirá realizar una evaluación simulada de la realidad, asegurándonos de que el crecimiento proyectado se base en indicadores sólidos. De esta manera, el presupuesto estará en función de un crecimiento realista y alcanzable, lo que nos permitirá tomar decisiones más informadas y acertadas, ajustadas a la realidad económica de nuestra empresa.
El contexto actual y su impacto en la planificación presupuestaria
En el escenario global actual, las organizaciones enfrentan desafíos significativos debido a la volatilidad económica y las tensiones geopolíticas. Las fluctuaciones en los mercados financieros y las variaciones en las tasas de interés han afectado la capacidad de planificación a largo plazo. Además, la inflación sigue siendo un tema trascendental, impactando tanto los costos operativos como el poder adquisitivo de los consumidores. Según el Fondo Monetario Internacional (FMI), se espera que la inflación global se mantenga elevada en 2024, lo cual añade una capa de complejidad adicional a la gestión presupuestaria.
En este contexto, la flexibilidad presupuestaria se convierte en una herramienta esencial. Las empresas deben estar preparadas para ajustar sus proyecciones financieras en respuesta a cambios rápidos en el entorno económico. La capacidad de adaptarse y reaccionar ante estas fluctuaciones puede ser la diferencia entre el éxito y el fracaso. La colaboración entre las áreas financieras y las demás áreas de la empresa es más crítica que nunca. Es necesario que todos los departamentos comprendan las implicaciones financieras de sus decisiones y trabajen juntos para encontrar soluciones que beneficien a toda la organización.
Estrategias para una conciliación efectiva
Comunicación Transparente: Establecer canales de comunicación claros y abiertos entre todas las áreas. Esto incluye reuniones regulares para discutir el estado financiero y cualquier ajuste necesario en el presupuesto. Incluir a representantes de todas las áreas en el proceso de planificación presupuestaria. Esto asegura que todas las perspectivas sean consideradas y que se sientan comprometidos con las decisiones finales.
Flexibilidad y Adaptabilidad: Implementar un presupuesto flexible que permita ajustes en respuesta a cambios en el entorno económico. Esto incluye tener un plan de contingencia para diferentes escenarios.
Análisis Continuo: Realizar análisis financieros continuos para comparar el desempeño real con el presupuestado. Esto permite identificar rápidamente cualquier desviación y tomar medidas correctivas a tiempo.
La conciliación presupuestaria entre las áreas de una organización es un proceso complejo pero esencial para asegurar la sostenibilidad y el crecimiento a largo plazo. En un entorno económico cada vez más incierto, la colaboración, la comunicación y la flexibilidad se vuelven pilares elementales. Al seguir las estrategias mencionadas y mantener una perspectiva realista y ajustada a la realidad económica, las empresas digitales estarán mejor posicionadas para enfrentar los desafíos y aprovechar las oportunidades que se presenten.
Escrito por: Valentina Díaz / Directora Financiera Pantera Makers
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